Los Socialistas y la Educación

Los socialistas aspiramos a una educación integral que sea el pleno reflejo de la sociedad que deseamos construir: justa, igualitaria, inclusiva y de pleno respeto a la diversidad.

Ponemos en el centro a la persona humana. Hacemos a la educación responsable de la transmisión de los valores de la libertad, la igualdad y la fraternidad. Le atribuimos un carácter laico, público y democrático que posibilita la construcción de una sociedad solidaria, pluralista y libertaria.

La educación es un derecho inherente a las personas que el Estado debe garantizar constitucionalmente a cada ciudadano y ciudadana de Chile. Esta consagración constitucional permitirá su efectiva protección jurídica. Todos los chilenos y chilenas deben tener derecho garantizado al acceso a un sistema público de educación, con elevados parámetros de calidad en todos sus niveles y modalidades, tecnológicamente humanista y culturalmente pertinente.

Los socialistas consideramos fundamental la recuperación del rol activo del Estado en la educación, con carácter responsable y regulador, en contraposición al actual Estado subsidiario, que entrega fundamentalmente al mercado la función asignadota de recursos.

¿Quienes somos y que queremos?

La Juventud Socialista busca transformar radicalmente la sociedad, a una que se rija por los principios de la igualdad, libertad y justicia social, que establezca una plena representación e integración de todo joven. Conduce todo su actuar y capacidad político organizacional hacia la superación de las contradicciones sociales que generan explotación, dominación y alienación ya sea de clase, genero o etnia, en particular de los jóvenes, conduciendo todo su actuar y capacidad hacia la superación de las contradicciones sociales. En el logro de estos objetivos se debe trabajar por la superación de las formas de explotación, exclusión, marginación y discriminación que afectan a los jóvenes; dinamizar y democratizar los espacios cotidianos del mundo juvenil. Fomentar la igualdad, libertad y participación de todos los jóvenes, sin distinción de raza, edad, sexo, estirpe o condición; y que sea pertinente con las necesidades juveniles actuales promoviendo políticas que busquen avanzar hacia una sociedad donde toda persona tenga asegurado los derechos esenciales del ser humano, es decir, que aseguren la plena igualdad de derechos, deberes y garantías para tod@s, en todos los ámbitos, sin censura y sin restricción, teniendo como limite el derecho de los otr@s. Propiciando una sociedad que valore y respete la diversidad.